OLORES NAUSEABUNDOS: CLAUSURAN FÁBRICA QUE EMANABA GASES Y RESIDUOS PELIGROSOS PARA EL MEDIO AMBIENTE
El Cuerpo de Investigaciones Judiciales constató con drones la violación de clausura y funcionamiento del lugar.
En el marco de una causa que investiga la Unidad Fiscal especializada en Materia Ambiental a cargo de Carlos Rolero Santurián, el Cuerpo de investigaciones Judiciales coordinó un allanamiento a una fábrica de tambores metálicos en el barrio de Pompeya, que culminó con la imputación del explotador comercial del predio, del socio gerente y al jefe de planta. El establecimiento, que ya contaba clausuras previas vigentes, fue vuelto a clausurar.
La causa se inició a raíz de denuncias de varios vecinos que manifestaron sentir un olor tóxico y nauseabundo, que les producía dolores de garganta, problemas para respirar, tos, cefaleas e irritación en los ojos.
A los fines de realizar de tareas de investigación, la Dra. Cristina Lara a cargo del Juzgado PCyF 21, autorizó la utilización de un drone por parte del CIJ, y a través de las fotografías y filmaciones obtenidas se pudo advertir la violación de clausura y el pleno funcionamiento del espacio, en que el que se fabricaban tambores metálicos con maquinarias que generaban emisiones de gases tóxicos así como el posterior el arrojo ilegal de residuos y desechos que impactan en el medio ambiente.
El Cuerpo de Investigaciones Judiciales coordinó el operativo del que también participaron la División de Operaciones Especiales de la Policía de la Ciudad, División Operaciones del Departamento de Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina, Dirección General de Red Pluvial, Dirección General de Protección del Trabajo, Dirección General de Fiscalización y Control y la Unidad Operativa de Fiscalización Integral.
Los responsables están imputados por cuatro hechos de violación de clausura, agravada por tratarse de actividad critica (Ley 2543 GCBA), en concurso con arrojos de sustancias insalubres y ejercicio ilegal de una actividad.